El otoño es una de las estaciones más especiales para disfrutar de los productos que nos ofrece la tierra de Castellón, en la Comunidad Valenciana. A medida que las temperaturas comienzan a descender, los campos de nuestra provincia se llenan de colores y sabores que invitan a descubrir una gastronomía marcada por la tradición y la calidad de los ingredientes locales.
¿Quién no ha saboreado una calabaza asada en las primeras semanas de octubre? Es un placer sencillo pero que resume a la perfección el alma de nuestra tierra. La calabaza, omnipresente en los mercados y ferias, es uno de los primeros signos de que el otoño ha llegado, con su dulce y suave carne que nos llama a cocinar con ingredientes frescos y de temporada.
En esta época, los huertos empiezan también a ofrecer las primeras mandarinas, que van madurando bajo el sol suave de otoño. Estas mandarinas son un auténtico regalo de nuestros árboles cítricos, conocidos por su jugosidad y sabor equilibrado. No hay nada como una mandarina recién cogida, su aroma es un anuncio de las deliciosas posibilidades que nos esperan en la cocina.
En este artículo queremos destacar una receta que captura la esencia de nuestra provincia, utilizando productos que podemos encontrar fácilmente en los mercados locales: una tarta o cake de calabaza con mandarina. Esta combinación, que añade además el toque fresco de la zanahoria, es un homenaje a los sabores de Castellón, donde la tierra nos ofrece lo mejor de cada estación. Aunque la zanahoria es accesible durante todo el año, su dulzor se mezcla de manera sublime con la calabaza asada y el ácido de la mandarina, creando una receta perfecta para disfrutar en familia o con amigos.
La gastronomía de Castellón siempre ha sabido sacar el máximo partido a los ingredientes de proximidad, aprovechando la riqueza de nuestro clima y suelo. Y este cake de calabaza con mandarina es un claro ejemplo de ello: un postre fácil de hacer, con productos frescos y naturales que podemos adquirir directamente de los productores locales, favoreciendo una alimentación sostenible y consciente.
Así que os animamos a que encendáis el horno y os dejéis llevar por los sabores del otoño. Esta tarta es sencilla de preparar, pero su sabor os sorprenderá por su riqueza y matices. No sólo es deliciosa, sino que además lleva consigo la esencia de nuestra tierra, el esfuerzo de nuestros agricultores y la generosidad de la naturaleza que nos rodea. En Castellón, cada temporada nos ofrece una nueva oportunidad para disfrutar de lo mejor de la huerta, y el otoño, con sus calabazas, mandarinas y zanahorias, no es una excepción.
¡Disfrutad de esta deliciosa receta y de los productos de nuestra provincia, donde el otoño se saborea en cada bocado!
https://www.macajulieta.es/bizcocho-de-zanahoria-calabaza-y-mandarina