Renfe lanzará una campaña de concienciación a la ciudadanía en la que se incide que el mal uso de los abonos supone un perjuicio para el resto de los ciudadanos que desean realizar sus desplazamientos
Renfe apela a la responsabilidad de los viajeros y pide un buen uso de los abonos Avant y Media Distancia convencional. Con objeto de fomentar el buen uso de estos títulos bonificados, así Renfe lanzará una campaña de concienciación a la ciudadanía en la que se incide que el mal uso de los abonos supone un perjuicio para el resto de los ciudadanos que desean realizar sus desplazamientos.
Además, Renfe realizará controles aleatorios en sus servicios de Media Distancia y Avant para comprobar el uso correcto de los títulos bonificados.
En el caso de detectarse incumplimiento de la normativa se aplicarán las medidas antifraude establecida en estos servicios. Este año, Renfe va a profundizar en las iniciativas para evitar el uso irregular de los abonos en los servicios de Media Distancia y en los Avant, en donde todavía se detecta un uso irregular que impide disfrutar de estas medidas a todos los ciudadanos. Así, en los recorridos de Media Distancia por vía convencional, Renfe ha ampliado a una hora (actualmente son 10 minutos) el tiempo en el que una reserva debe ser formalizada o, en caso de no realizar el viaje, anularse.
De esta forma, los usuarios que no vayan a utilizar la plaza reservada con los abonos deberán cancelarla con un mínimo de 60 minutos de antelación. En caso de que, al menos en tres ocasiones, no hayan cancelado la plaza con la mencionada antelación, perderán el derecho a adquirir nuevos abonos durante los siguientes 30 días. Previamente, Renfe enviará al viajero, con ocasión de las dos primeras cancelaciones no realizadas con la antelación mínima requerida, sendas comunicaciones al contacto facilitado por el mismo, que le advierta de las posibles consecuencias.
Controles en accesos y trenes
En ocasiones, hay usuarios de abonos Avant y Media Distancia convencional que reservan varias plazas y después no viajan y tampoco las anulan, lo que dificulta que otros viajeros con necesidad de desplazarse en esos horarios y trayectos puedan conseguir su plaza, y provoca que el tren lleve plazas desocupadas que no se pueden comprar ya que aparece “tren completo” en la venta. También se han detectado usos fraudulentos, como que viajeros usen los abonos de otros titulares. Renfe recuerda que los abonos objeto de subvención son nominativos (se precisa que el DNI coincida con el usuario del abono). Para viajar a bordo de sus trenes es necesario formalizar los billetes con abono y que la identidad del viajero sea coincidente con la que aparece en su título de transporte.
En el caso de demostrarse un uso incorrecto, Renfe sancionará a los viajeros, según dispone la normativa de ‘Condiciones generales de los contratos de transporte’ de Renfe Viajeros.